El verano se acerca, el cereal
comienza a darse, en la era se oye
el golpeteo del mazo de los trilleros sobre los pedernales. El griterío de la
chiquillería –las vacaciones ya están ahí- se oye por el pueblo y su eco se
escucha en el contorno de Camporredondo. Pero mal deben de andar las relaciones
entre ellos porque oigo que uno dice a otro: ¡pos ahora te desajunto, no quiero que vengas conmigo!
Otra palabra que hace algunos
decenios que no oigo es: descapuchar.
Me parece lógico si tenemos en cuenta que por estos confines, hoy, se siembran
muy pocos gabrieles. Además de que no sería muy rentable descapuchar. Ahora –por su baja rentabilidad- se dejarían perder
los capuchos.
Una palabra más que no está
mucho al uso -o eso me parece- es descollar.
Desde que nuestros abuelos
fueron abandonando este valle de lágrimas, y sus nietos fueron adquiriendo
cultura académica, otra de las palabras que no se oyen es diquiá.
La palabra –dispensa- tenía un solo significado,
siempre el mismo, ¿por cuál ha sido sustituida?
La palabra –dir- hace más tiempo que desapareció,
pero en nuestros oídos aún resuena la voz de nuestros mayores.
La palabra domar parece, a mí me lo parece en este momento, que sólo se
refiere a la doma (amansamiento o
dominio) de alguna bestia salvaje o semi salvaje.
Enaguachar no puedo decir que fue palabra
muy usada, pero lo que sí es cierto es que hoy no la oigo nunca.
Así que sobre este grupo de
palabras, que creemos en trance de desaparecer, haremos algún comentario a continuación.
Después, si el tiempo -y la máxima autoridad- lo… permiten, vendrán otras.
DARSE.- Marchitarse, ceder,
entregarse “Parece que cede, ya se va dando”.
Ejemplos de darse en el mundo
rural: se dice darse al hecho de que el cereal vaya cambiando de color, ir madurando,
“¿qué tal va la cebada?” “Ya se da, en pocos días echo a segar”. “Tienes que
regar aquellas remolachas, que ya se dan” se decía cuando por falta de humedad
se ponían lacias. El trigo se da y casi no ha espigado. A esto va encaminado el
darse al que me refiero. Hay otras muchas acepciones que el DLE recoge.
DESAJUNTAR.- Expulsar a uno de la
cuadrilla de amigos. “Ya no te ajunto”
“vete que no te ajuntamos” decía el niño cuando las relaciones se deterioraban
con el amigo: “pos ahora te desajunto”.
Era ésta una frase muy empleada
siempre que, por cualquier circunstancia, se creaba tensión entre dos niños, o
entre la cuadrilla y uno de los componentes. Era como decir, ya no eres mi
amigo, no quiero jugar contigo. Fuera del mundo infantil nunca la oí.
El DLE recoge como: apartar,
desunir, desdoblar.
DESAUGUE y DESAGÜE.- Método, o sistema, para eliminar el ahogo. 2º Método,
sistema o conducto por donde se eliminan líquidos.
Desaugue fue palabra muy usada
en el mundo rural. Aún se oye entre personas mayores… y no tan mayores.
Creo que la expresión rural
también debería ser admitida en el mundo llamado culto porque, a ver: si algo
–alguien- por cualquier motivo ajeno al agua se está ahogando… por
atragantamiento por ejemplo ¿cómo le llamaríamos al método para de desahogarle?
Si por el contrario es quitarle el exceso de agua parece muy correcto que le
apliquemos des-agüe: quitar el agua.
Desahogar=quitar el ahogo.
>desaugue
Desaguar=quitar el agua.
>desagüe.
De todas maneras ya he dicho que
en el mundo rural aún se usa desaugue.
El DLE recoge desagüe.
DESCAPUCHAR/escapuchar.- Arrancar el garbanzo con su
vaina (capucho) de la mata. También se dice del hecho de recoger capuchos del
suelo. >Escapuchar. Recoger capuchos.
En los tiempos en que “no
llegaba la sal al agua”, no podía perderse ni siquiera un garbanzo. Por ello se
acudía al terreno donde se hubieran recogido los garbanzos y, así como se
acudía al rastrojo para recoger la espiga caída, se acudía al garbanzal -ya
acarreado- para recoger el capucho caído.
No recogida en el DLE
DESCOLLAR.-
Se usaba para decir que
aquel/la comenzaba a sobresalir. (¡Ya comienza a descollar!).
Normalmente se usaba cuando
el/la joven pasaban de la adolescencia al mundo adulto. “Ya va descollando, se
decía”.
DIQUIÁ.- De aquí a… “De aquí a un
rato vamos”. “diquiá un rato vamos”.
Diquiá, cualquiá, siquiá… igual
que: de aquí a, cualquiera, siquiera, etc.
Aún se usan éstas, y otras
palabras similares, entre la gente mayor.
Palabra que no recoge el DLE.
DISPENSA.- Lo mismo que despensa: espacio
dedicado a las viandas y útiles de cocina.
Y digo yo: ¿no es posible que
se aplicara la palabra dispensa porque el cuarto nos dispensaba todo lo
necesario para la cocina? ¡Vale, vale! sólo he preguntado si existe esa
posibilidad... Lo que sí es cierto, es que nuestras abuelas (siglo XIX) ya
usaban la palabra dispensa.
El DLE recoge la palabra
despensa con esta acepción.
DIR.- Lo mismo que ir. “…Que no vayas,
que no debes dir…” decía un señor de mi pueblo.
Es un prefijo formado por las
sílabas “de” e “ir”. ¿Será eso? Se me acaba de ocurrir.
Por supuesto, no lo recoge el
DLE.
DOMAR.- Deformar, doblegar, ceder… “¡cuidado,
se está domando la viga de carga!”.
ENAGUACHAR.- Añadir agua adulterando otro
líquido: leche, vino etc. >Aguachar, aguachinar.
Camporredondo 6-10-2017
Querido Gaude: Ya se te echaba de menos. Como siempre, nos recuerdas unas entrañables palabras y expresiones a punto de extinguirse. Muy interesantes los comentarios. Abrazos.
ResponderEliminarAy, ay, ay… mucha es la voluntad pero…
EliminarUn renovado abrazo campero.